En un principio eso de estar presente y estar pendiente, era suficiente. Mira, nos ha salido un pareado. Con estar pendientes nos referimos a controlar las notificaciones y revisar los mensajes directos. Pero claro, esto era al principio (mucho tiempo atrás). Y era solo lo que parecía, nada que ver con la realidad.
Pero vamos al hoy. Con este mundo ya bastante avanzado, para nadie es nuevo que debemos estar presentes, sí; pero también tener un objetivo y, por supuesto, una estrategia para alcanzarlo. Y easto es algo que tenemos más fácil desde que ha aparecido en nuestras vidas Twitter Analytics.
Si has invertido tiempo, dinero y esfuerzos en definir e implementar una estrategia a tu presencia en Twitter, esta herramienta que la propia red social pone a nuestra disposición no la deberías pasar por alto, ya que te permitirá ver la tasa de interacción de todos tus tweets, el rendimiento de cada uno de ellos, pero sobre todo te permitirá conocer un poco más y mejor a tus seguidores.
El rendimiento es la tasa interacción que tiene cada tweet una vez que se publica y para ello se tiene en cuenta dos factores:
- El número de impresiones, es decir, cada vez que el tweet es visualizado por un usuario
- La interacción que dicho Tweet genera: retweets, favoritos, las respuestas directas, pero además ahora te muestra el número de veces que se clicka en los enlaces del tweet. Muy útil para ver si lo que twitteas es interesante para tus seguidores o no, información relevante a la hora de comprobar que la estrategia está funcionando.
Desarrolla y define tu estrategia. Impleméntala. Analiza. Y cambia lo que no funciona y potencia lo que sí.
Dedica tiempo al análisis. Es importante saber lo que más se ve, tener identificado el contenido que mejor funciona… Y también el que no funciona, para ir sustituyéndolo por otros contenidos.
Pero también es importante conocer a tus seguidores: dónde viven, qué les gusta, cuál es su estilo de vida, qué edades suelen tener, género…
Solo el análisis te permitirá ir adaptándola información a tu estrategia, regulándola, evaluándola y madurándola.
Decimos madurando porque la información es una información que está vida; es decir, puede ir cambiando. Aparecerán nuevos seguidores, surgirán nuevas tendencias, etc. Así que se trata de una evolución continua que precisa de un análisis continuo.
¿A qué esperas? ¡Manos a la obra! 😉