Hay un refrán muy conocido que aplica perfectamente en la era digital: “una imagen vale más que mil palabras”. Cuando de un e-commerce se trata, las imágenes juegan un papel importantísimo:
hay que recordar que los productos que puedas ofrecer tienen que estar detallados lo más posible y una imagen será capaz de hacer la diferencia.
Se trata de que en un e-commerce o tienda online, tener las imágenes perfectas podrá generar mayores ventas.
Esto porque definitivamente, una tienda online no será nada si sus imágenes no están en las mejores condiciones. Se puede describir al producto a la perfección, incluso tener una excelente oferta, pero si las imágenes dejan que desear, hay altas probabilidades de que la venta no llegue a concretarse.
Esfuerzos por la borda
Imagina por un momento que estás buscando un producto determinado. Haces la tradicional búsqueda web y esta te lleva a una tienda que posee una buena oferta. Pero, cuando vas a ver la imagen del producto, está pixelada, no permite apreciar bien el producto en sí o incluso está tomada de un solo ángulo y no se ve el objeto completo.
¿Qué harías en este caso? El comportamiento de buena parte de los usuarios indica que no llegan a concretar la venta cuando las imágenes son de baja calidad. De hecho, imágenes malas pueden calificar a un sitio como mediocre.
Todos los esfuerzos que puedas haber dedicado a construir tu tienda online se verán echados por la borda en cuestión de segundos si las imágenes de tus productos no son lo suficientemente profesionales: una imagen puede comunicar de entrada mucho más que la más detallada descripción.
Qué se mira primero
La facilidad de las compras online tiene una desventaja: a diferencia de cuando las personas recorren las tiendas en busca de un producto, pudiendo verlo y tocarlo, una compra online gana en velocidad pero pierde en contacto directo.
Esta diferencia sustancial hace precisamente que las imágenes sean vitales en un e-commerce: esto será lo primero que vea un cliente potencial cuando llegue a tu página. Antes que leer todas las ventajas que tu producto pueda tener, la persona verá la imagen.
Por esto es que las imágenes deben ser de la más alta calidad posible: recuerda que deben llenar el vacío de no poder tocar el producto con sus propias manos sino hasta que la venta se haya concretado y puedan tenerlo en sus manos.
Imágenes y redes sociales
Una excelente imagen de tu producto podrá ser la mejor embajadora de tu marca: las imágenes representarán a tu producto de una buena manera si son buenas y mucho mejor aún si son increíbles.
En las redes sociales, los contenidos que más se comparten son las imágenes. Por eso, si a tu marca le interesa tener presencia en ellas, tendrás otra razón para querer que tus imágenes sean las mejores. Incluso, unas buenas imágenes impulsarán aún más tu presencia en redes como Instagram, Pinterest e incluso Facebook.
Consejos para las mejores imágenes
- Verifica siempre la calidad. La idea es que los clientes obtengan una imagen que sea lo más clara posible. El brillo, el enfoque y la profundidad de la imagen debe ser la correcta.
- Muestra el producto desde varios ángulos. Poder ver el artículo u objeto desde varios ángulos aumentará la experiencia de los clientes: lo verán y podrán analizar mejor sus ventajas. Además, es buena idea que tengan opción de zoom para ver mejor los detalles.
- Enseña todas las variantes. Si tienes productos que varían de color u otras características, entonces debes mostrar imágenes diferentes para cada variación. Recuerda que los clientes quieren ver cómo se ve cada producto.
- Sé consistente. Esto significa que debe existir una cierta unidad entre todas las imágenes de tus productos. Esta unificación la podrás lograr en parte si siempre usas los servicios del mismo fotógrafo.
En síntesis, las imágenes de tu tienda online deben estar cuidadas hasta el último detalle.