El nombre sí importa
Si tu proyecto es nuevo, dedica el tiempo necesario a buscar un nombre que transmita lo que quieres, pero que a la vez pueda ser fácilmente recordado y no resulte confuso.
Unidad de marca
Además, lo ideal es que puedas utilizar el mismo nombre en todas las redes sociales en las que vayas a estar presente y utilizar siempre el mismo nombre. Indudablemente, así, los usuarios nos van a encontrar más fácilmente.
Si se puede medir, se puede mejorar
Realizar un seguimiento continuo a lo que sucede en la web y en las redes sociales es fundamental para comprender las necesidades de nuestro público, conocer el verdadero impacto de nuestras acciones y poder optimizar nuestras estrategias para hacerlas cada vez más efectivas.
No actúes por actuar. Analiza la situación, planea una estrategia, ejecútala, mide de forma habitual y enfoca de manera continua tus acciones a la optimización.
En la variedad está la clave
Todas las redes son únicas y diferentes a cualquier otra. Cada una cuenta con sus propias singularidades… Precisamente por ello, no es buena estrategia publicar lo mismo en todas las redes sociales. Los públicos varían, por lo tanto no podemos hablarles igual, ni ofrecerles lo mismo; los algoritmos tampoco son los mismos, ni funcionan igual; las herramientas de interacción tampoco son iguales en todas las redes sociales, etc.
Personaliza cada mensaje para cada una de las redes sociales en las que estés presente y aprovecha el potencial de cada una de ellas.
Prepárate para un cambio constante
El mundo digital es un entorno en constante movimiento, en continua evolución, en imparable cambio… El mayor error que puedes cometer es creer que todo va a funcionar siempre igual.
Fórmate, prepárate, mantén despierta la inquietud, sé curioso, aprende, practica, comete errores, corrígelos… y nunca pierdas la ilusión, ni las ganas. Haz todo aquello que puedas, desarrolla nuevas habilidades; y lo que no puedas abarcar, delégalo.