El posicionamiento orgánico de una página web no depende únicamente de una práctica o acción. Sin embargo, todas las que intervienen, en mayor o menos medida influyen, por lo que conviene tenerlas todas en cuenta e ir adaptando lo necesario. Y optimizar las URLs es una práctica sencilla y al alcance de todos.
- Al leerla debería dejar claro de qué trata el artículo o contenido
Cuando alguien lee una URL, debería «adivinar» de qué va el artículo. Seguro que has visto en algún momento estos dos ejemplos:
– www.tupaginaweb.com/?=12356
– www.tupaginaweb.com/tendencias-cocinas-2016
Aunque lo cierto es que ambas son válidas, es mejor la segunda opción, ya que nos permite hacernos a la idea de la temática y además utiliza palabras clave. - Menos es más. O cuanto más corta sea la URL, mejor
No hay una medida preestablecida, pero es recomendable que sean lo más cortas posible para facilitar a los usuarios que la recuerden fácilmente.
La clave está en utilizar para la URL las palabras más significativas y fáciles de recordar. - Evita las mayúsculas
Las URL permiten diferenciar entre letras mayúsculas y minúsculas. Por ello, si realmente no son necesarias, evita las mayúsculas. - Separa las palabras con guiones medios
Este punto es muy importante. Y es que, si en lugar de guión medio utilizamos guión bajo, Google interpreta que no hay espacios entre las palabras y las leerá como si fueran una sola.
Hablamos de guión bajo porque es el error más común, pero lo cierto es que deberías estar cualquier caracter especial. - Quita las stop-words de tu URL
Las stop-words son palabras que no aportan información sobre el contenido, como pueden ser las preposiciones o los artículos. Te ayudará a reducir la longitud de la URL y además este tipo de palabras no son tenidas en cuenta por los buscadores.